El frío ya está presente y es hora de prepararnos para calefaccionar nuestros hogares. Ya sea que cuentes con estufas, calefactores o salamandras a leña, es importante que los cuides correctamente y que se encuentren en las mejores condiciones para poder disfrutar de un invierno acogedor.
Consejos para cuidar los calefactores y estufas a leña
Los calefactores y salamandras a leña necesitan mantenimiento para que perduren más tiempo. Sobre todo si los productos fueron utilizados intensamente en anteriores temporadas de frío o si quedaron residuos del uso de leña, es importante limpiarlos correctamente para un buen funcionamiento.
En el siguiente listado te dejamos 5 tips para mantener y cuidar tus artefactos de calefacción a leña para este invierno:
- Remover las cenizas de la caja de fuego cuando se encuentre llena. Aconsejamos que no pase más de 2 cm aproximadamente por debajo del borde del marco inferior de la puerta.
- Para proteger el fondo de la caja, dejar siempre una capa mínima de cenizas.
- Dividir la leña buena y brasas de las cenizas dejándolas al fondo de la caja de fuego.
- Limpiar el artefacto cuando el equipo y las brasas estén frías y apagadas. De ser necesario, las cenizas calientes se pueden volcarlas en un recipiente metálico y colocarlas en un lugar seguro para que se enfríen más rápido.
- Colocar polvo deshollinador cada 20 días aproximadamente para limpiar el conducto del calefactor.
Es sumamente importante estar atentos y cumplir con las recomendaciones cada vez que prendemos los calefactores a leña. Siguiendo estos consejos podemos evitar inconvenientes en nuestros hogares y hacer un uso seguro de los equipos.
